“CHAMINERAS” DEL PIRINEO DE HUESCA

 

Después de realizar una ruta por el pirineo oscense, nos dimos cuenta que hay un elemento común en casi todos los pueblos altoaragoneses que llama mucho la atención a los viajeros: son las majestuosas chimeneas troncocónicas que permanecen altivas en los tejados de las casas más antiguas.

Estas chimeneas se denominan popularmente chamineras o chimeneras.

Chimenea muy antigua y conservada igual en Siresa

Las auténticas las vimos en algunos de los pueblos abandonados que existen en la zona. Estas chimeneas no han sido reformadas ni modificadas como las de muchas casas habitadas, por lo que se puede ver el aspecto original de cuando fueron levantadas.

Chimeneas en Ainsa

Chimeneas en Ainsa

Chimeneas en Ainsa

Encima de cada una de ellas se colocaba una piedra, casi siempre en forma de cono, aunque puede tener otras diversas formas. Muchas de estas piedras tienen un agujero, lo cual hace que el viento silbe al pasar por los tejados. A estas piedras se las domina ESPANTABRUJAS.

Serós 

Serós 

¿Por qué espantabrujas?

Muchas de las leyendas populares hablaban de unas brujas que por la noche subían a sus escobas y sobrevolaban por encima de las casas para hacer de las suyas. Las puertas estaban bien cerradas, pero había un espacio que siempre estaba abierto: la chimenea.

Esta creencia en las brujas y los maleficios que podían acarrear hizo que se colocasen las espantabrujas para que no pudieran bajar por el tiro de la chimenea. Era la forma de protegerse de su presencia.

Chimenea con su espantabrujas en Ansó

Chimenea con su espantabrujas en Ansó

Si se mira el contexto histórico y cultural del Alto Aragón las espantabrujas también encarnaban la protección de los habitantes de la casa y su prosperidad.

Y para reforzar esta protección antiguamente se colocaban también las tenazas abiertas en forma de cruz en el fogaril, o se hacía esa cruz en las cenizas que quedaban en el rescoldo después de apagar el fuego antes de ir a la cama.

Espantabrujas en chimenea de Lárrede

Espantabrujas en chimenea de Lárrede

Espantabrujas en chimenea de Oliván

¿Cómo son las espantabrujas tradicionales?

Estos remates o símbolos que se colocaban sobre las chimeneas se construían y tallaban en piedra tosca, un tipo de roca muy porosa y ligera. Además tenían algún orificio que, como hemos dicho, servía para el paso del viento y poder escuchar su silbido.

Eran de formas geométricas, como conos y pirámides; las hay con forma de cruz o de un muñeco muy feo con los brazos abiertos.

Los ejemplos más originales los vimos en pueblos abandonados ya que no han reformado las casas y mantienen su esencia.

Espantabrujas con un pájaro en chimenea de Embún

Las chimeneas en la actualidad

Actualmente las casas que se rehabilitan conservan y restauran elementos de entidad del patrimonio arquitectónico y las salidas de humos son lo primero.

No se construyen con el fin de espantar a las brujas, sino como una pequeña obra de arte, pero, por si acaso, si yo fuera uno de sus moradores, no olvidaría hacer una cruz en la ceniza cuando se apagara el fuego.

Hay que tenerlo en cuenta. A raíz de esas costumbres, ahora recuerdo a mis suegros aragoneses que hacían una cruz en el pan antes de partirlo en la mesa.

Biniés, chimenea antigua sin reformar

Chimenea reformada en Boltaña

Fiscal

Urdués

A estas alturas no dejo de preguntarme si las chimeneas del Alto Aragón son una tradición o auténtico arte. Todas son una verdadera maravilla que no se puede dejar de contemplar y fotografiar.